Cada 9 de diciembre, el mundo se une para reflexionar sobre la corrupción, un flagelo que impacta no solo las finanzas públicas y privadas, sino también la confianza en nuestras instituciones y los valores fundamentales que rigen nuestras sociedades. Esta fecha nos recuerda que la lucha contra la corrupción no es exclusiva de los gobiernos; involucra a todos: ciudadanos, empresas e instituciones.
La corrupción se manifiesta de múltiples formas y afecta sectores clave en los sistemas económicos y sociales. Según el informe High-risk areas of corruption in the EU: A mapping and in-depth analysis, los sectores de contratación pública, construcción y salud destacan como áreas de alto riesgo en los Estados miembros de la Unión Europea. Estas áreas concentran grandes volúmenes de recursos y decisiones críticas, lo que las convierte en terreno fértil para prácticas corruptas, como el favoritismo, los sobornos y las irregularidades en las licitaciones.
Aunque este análisis está centrado en Europa, los retos descritos tienen paralelismos en otras regiones, como América Latina, donde la corrupción también socava la confianza social, incrementa las desigualdades y dificulta el acceso a servicios esenciales.
La ética como fundamento de la transparencia
El primer paso para combatir la corrupción es reconocer que no se trata solo de un problema sistémico, sino también de decisiones individuales. Como destaca el informe Ética empresarial: única solución contra la corrupción de KPMG, las empresas desempeñan un papel central en esta lucha. Sin embargo, no basta con implementar programas de cumplimiento (Compliance); estos deben ir acompañados de un compromiso auténtico con la ética, liderado desde las altas esferas de la organización y permeando hacia todos los niveles.
La ética empresarial, lejos de ser un complemento, debe ser el núcleo de la estrategia organizacional. Las empresas no son entes abstractos; están formadas por personas, y su integridad colectiva se construye sobre la base de decisiones individuales responsables.
Gobierno corporativo: una herramienta clave en la lucha anticorrupción
Mientras las empresas privadas se esfuerzan por fortalecer sus programas de Compliance, las empresas estatales enfrentan desafíos particulares. Según el informe Gobierno Corporativo y Corrupción Empresarial en las Empresas Estatales, el gobierno corporativo se presenta como una solución clave para mitigar riesgos y garantizar la transparencia en estas organizaciones.
La implementación de principios como la diversificación de los directorios, la inclusión de auditores independientes y la creación de canales de denuncia accesibles no solo mejora la gobernanza, sino que también fortalece la confianza de la ciudadanía y los inversionistas. Estos mecanismos son esenciales para garantizar que las decisiones empresariales estén guiadas por criterios técnicos y éticos, no por intereses políticos o personales.
En este contexto, Costa Rica ha dado pasos importantes para fortalecer la transparencia en la gestión pública. Una de las iniciativas destacadas es el proyecto del Código de Ética en Contratación Pública, actualmente en construcción, que busca promover la ética, la transparencia y la rendición de cuentas en los procesos de contratación. Aunque aún es una propuesta, refleja un esfuerzo concertado por establecer estándares claros que eviten prácticas corruptas y fomenten la libre competencia.
La corrupción no es un problema exclusivo de los sistemas; comienza con pequeñas decisiones cotidianas. La lucha contra este fenómeno requiere de una transformación cultural en la que todos asumamos la responsabilidad de actuar con integridad, desde nuestras interacciones personales hasta nuestras actividades profesionales.
Este compromiso colectivo también se refleja al fortalecer las políticas públicas y adoptar estándares internacionales, como la ISO 37001 en sistemas de gestión antisoborno. Además, las instituciones deben garantizar que las herramientas para combatir la corrupción sean efectivas y accesibles, desde los programas de Compliance hasta los canales de denuncia protegidos.
Una pausa para la reflexión: integridad en el día a día
Este 9 de diciembre, en medio del bullicio de las festividades decembrinas y la inercia de un mundo que a menudo corre más rápido de lo que reflexiona, tenemos la oportunidad de hacer una pausa. Más allá de los estándares, las normativas o los programas de cumplimiento robustos que son fundamentales en la lucha contra la corrupción, es un momento para mirar hacia nosotros mismos.
La integridad no se mide únicamente en los grandes actos o en los principios que proclamamos, sino en esas pequeñas decisiones diarias que, acumuladas, definen quiénes somos. Es en el silencio donde elegimos la transparencia sobre la conveniencia. Es en las acciones aparentemente insignificantes donde podemos demostrar que nuestros valores no son negociables.
La corrupción, en todas sus formas, encuentra su campo de cultivo en la indiferencia y la justificación. Hoy, más que nunca, debemos recordar que cada oportunidad que tenemos para actuar con ética es una oportunidad para fortalecer el tejido social que nos une. ¿Cómo enfrentamos las pequeñas pruebas diarias de honestidad? ¿Somos capaces de elegir lo correcto incluso cuando nadie está mirando? Estas son las preguntas que marcan la diferencia entre contribuir a un mundo mejor o perpetuar las mismas dinámicas que queremos cambiar.
Este día nos invita a reflexionar sobre el poder de nuestras decisiones individuales, a recordar que la integridad es el mayor regalo que podemos dar a nuestras familias, comunidades y a nosotros mismos. Porque no hay norma ni política que sea tan transformadora como el ejemplo personal.
En esta temporada, cuando las luces y los festejos tienden a desviar nuestra atención, no olvidemos lo esencial: la integridad es nuestro verdadero legado. Cada acto de honestidad, por pequeño que parezca, es una semilla que puede florecer en un futuro más justo y transparente.
Catalina Moya
Asociada Senior
cmora@fayca.com
Fuentes:
• Comisión Europea. (s.f.). High-risk areas of corruption in the EU: A mapping and in-depth analysis. Recuperado de High-risk areas of corruption in the EU – Publications Office of the EU
• KPMG Venezuela. (s.f.). Ética empresarial: única solución contra la corrupción. Recuperado de etica-empresarial-unica-solucion-contra-la-corrupcion.pdf
• Vega Carrasco, G. C., & Tabra Ochoa, E. (2022). Gobierno Corporativo y Corrupción Empresarial en las Empresas Estatales. IUS ET VERITAS, (65), 134-149. Recuperado de https://doi.org/10.18800/iusetveritas.202202.009
• Dirección de Contratación Pública, Ministerio de Hacienda, Costa Rica. (2024). Borrador del Código de Ética en Contratación Pública. Recuperado de 3-Circulares2024.pdf